Chosica fue castigado por un gran huaico; un ruido
ensordecedor anunció la tragedia. Toneladas de roca, agua y lodo se abrieron
paso por la quebrada Rayo de Sol, en Chosica.
La fuerza del huaico, uno de los peores de los últimos
tiempos, destruyó los cinco diques de contención que existían en la quebrada,
ubicada en el límite con Ricardo Palma y que medían siete metros de alto, tres
de ancho y 15 de largo.
Un cerro pequeño cercano a la quebrada Rayo de Sol también
se desmoronó por efectos de los huaico -se calcula que fueron cinco- y
prácticamente desapareció del mapa.
Otros pueblos, como San Antonio, a la derecha del río Rímac,
también fueron víctimas de la furia de la naturaleza. Esto provocó que una
enorme roca volara por los aires, cual escena cinematográfica, atravesando todo
el cauce y destruyendo parte de un muro que protegía de un eventual desborde
del río al poblado Tres de Octubre, ubicado en la ribera izquierda del Rímac.
El lugar, donde habitan unas cinco mil familias, quedó
inundado por las aguas del río.
En la localidad de Moyopampa, cercana a Rayo de Sol, el
deslizamiento de lodo y piedras sepultó una retroexcavadora que había sido
llevada para la labores de limpieza. Su conductor tuvo que saltar de la máquina
para salvar su vida.
Muchos de los damnificados tuvieron que pasar esta madrugada
a la intemperie, debido a que por la caída de postes de electricidad, todo Chosica estuvo en
penumbras, y no se pudo disponer de la carpas.
Fallecidos
La cifra de fallecidos por la caída de huaicos en la víspera
en Chosica aumentó de cinco a siete personas, mientras que los desaparecidos
suman seis, señaló hoy el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) en su
último reporte de daños.
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